Direccion: Martín Cuervo.
Guion: Curro Velázquez,Benjamín Herranz.
Reparto; Jaime Lorente,Adriana Torrebejano.,Leo Harlem.,Llum Barrera,Antón Lofer.,Ana Jara.
Paula Prendes.,Salva Reina, Mariam Hernández,
Fotografía: Pablo Bürmann
Distribuidora: Beta Fiction Spain
Año: 2025
Título Original: Coartadas
Estreno En España: 28/11/25
Género: Comedia
Duración: 94 Minutos
ARGUMENTO
La historia trata sobre Miguel, dueño de la empresa Coartadas. La empresa se dedica a crear coartadas para gente que quiere engañar a sus parejas o tener excusas montadas para evitar ciertas situaciones. A la salida de uno de los encargos, que involucraba conducir un coche fúnebre, atropella sin querer a una chica (Noelia), no ocurre mucho, solo le rompe el dedo. Se la llevan al hospital y ahí se conocen y se gustan. Empiezan a quedar y se enamoran. Ella le dice que es jueza, y que odia a los mentirosos y los fraudes, por lo que Miguel le miente y dice que tiene una empresa funeraria. Un día conoce a sus padres y la sorpresa es que su padre es cliente de Miguel, que lo contrató para poder ponerle los cuernos a la mujer.
CRÍTICA
Hay películas que, desde su propio planteamiento, ya dejan claro que no aspiran a revolucionar nada… pero tampoco a tomarse demasiado en serio. Coartadas, remake del ya discreto filme francés Alibi.com, se instala exactamente en ese territorio: el de la comedia que cree que puede sobrevivir a base de golpes gruesos, humor zafio y situaciones que rozan —y a veces abrazan con gusto— la vergüenza ajena. El problema es que, cuando el original tampoco era gran cosa, replicarlo no suele traer buenas noticias.
La propuesta sigue a Miguel, dueño de una empresa especializada en fabricar coartadas para cualquiera que necesite una excusa a medida. Su vida se complica cuando conoce a Noelia tras un pequeño accidente y ambos inician una relación marcada por la gran mentira que él se ve obligado a sostener: hacerle creer que trabaja en una funeraria porque ella, jueza y enemiga declarada del engaño, jamás aceptaría la verdad. Lo que en otras manos podría haber dado lugar a una comedia ácida sobre las dobles vidas, aquí se queda en una sucesión de enredos torpones, gags que llegan tarde y una previsibilidad que pesa como una losa desde los primeros minutos
Las actuaciones tampoco ayudan. Hay una sensación constante de que todos interpretan en piloto automático, como si el humor estuviera pasado de fecha y ya no hubiese manera de insuflarle vida. Solo uno o dos gags —sí, esos dos que funcionan casi por accidente— logran arrancar una sonrisa sincera y evitar que el conjunto caiga en el tedio absoluto. El resto se queda en un humor caducado, heredado de una comedia francesa que ya en su día no pedía continuidad, y que aquí parece replicarse sin filtro ni revisión
Y, aun así, Coartadas tiene su pequeña anécdota curiosa dentro del rodaje: durante la filmación de la escena del coche fúnebre —pieza clave para que Miguel y Noelia se conozcan en este embrollo— un error en la mecánica del vehículo hizo repetir la secuencia varias veces más de lo previsto, provocando un ataque de risa generalizado en el equipo que, según cuentan, fue bastante más divertido que todo lo que luego quedó en pantalla. A veces ocurre: el rodaje es más gracioso que la propia película.
En definitiva, Coartadas es un filme que se queda a medio gas en prácticamente todo. Previsible, falto de chispa y con un humor que pide a gritos una puesta al día, deja la clara sensación de que ni sus intérpretes ni su guion creen demasiado en lo que cuentan. Un título menor que solo se salva por un par de momentos aislados y por el buen talante de un reparto que, aun perdido, intenta dignificar una comedia que ya nació agotada.
Una de esas películas que, como crítico, uno ve con la esperanza de encontrar algo reseñable… y sale pensando que quizá lo más honesto habría sido fabricar una coartada para no verla.
NOTA 2,5/10
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