Dirección: Scott Derrickson
Guion: Scott Derrickson & C. Robert Cargill
Basado en personajes creados por Joe Hill
Reparto: Ethan Hawke,Mason Thames,Madeleine McGraw
Jeremy Davies,Demián Bichir
Miguel Mora,Arianna Rivas
Anna Lorea,Graham Abbey
Maev Beaty
Productores Jason Blum; Scott Derrickson; C. Robert Cargill
Música: Atticus Derrickson
Fotografía: Pär M. Ekberg
Montaje: Louise Ford
Distribuidora: Universal
Año; 2025
Título Original; Black Phone 2
Estreno en España; 17/10/25 en el Festival de Sitges y 24/10/25
Genero: Terror, Thriller
Duración: 114 Minutos
ARGUMENTO
Han pasado cuatro años desde que Finn, con tan solo trece años, logró escapar tras matar a su secuestrador, convirtiéndose en el único superviviente del temido “Grabber”. Pero el mal verdadero trasciende la muerte… y el teléfono vuelve a sonar.
Ethan Hawke regresa al papel más siniestro de su carrera como el “Grabber”, que busca venganza desde el más allá atormentando a Finn (Mason Thames) a través de su hermana pequeña Gwen (Madeleine McGraw).
Mientras Finn, ahora con diecisiete años, intenta rehacer su vida después del cautiverio, la decidida Gwen, de quince, comienza a recibir llamadas en sus sueños a través del teléfono negro y a tener perturbadoras visiones de tres chicos perseguidos en un campamento invernal llamado Alpine Lake.
Decidida a resolver el misterio y liberar tanto a su hermano como a sí misma del tormento, Gwen convence a Finn para viajar juntos al campamento durante una fuerte tormenta de nieve. Allí descubrirán una aterradora conexión entre el “Grabber” y la propia historia de su familia.
Juntos deberán enfrentarse a un asesino que, desde la muerte, se ha vuelto aún más poderoso… y mucho más cercano de lo que jamás imaginaron.
CRÍTICA
Scott Derrickson regresa al universo que él mismo creó en Black Phone, pero lo hace con una secuela mucho menos inspirada y claramente inferior a su predecesora. Si en la primera entrega el director lograba generar una atmósfera inquietante, llena de tensión y con ese “mal rollo” tan característico del buen cine de terror psicológico, aquí todo se diluye en un relato que parece más preocupado por repetir fórmulas del género que por reinventarlas.
La historia arranca cuatro años después de los hechos ocurridos en la primera película. Finn, aquel niño que logró escapar del secuestrador conocido como El Raptor vive ahora con el trauma a cuestas, mientras su hermana Gwen empieza a tener visiones y llamadas en sueños a través del teléfono negro, advirtiéndole de nuevas víctimas en un campamento invernal. La premisa podría haber dado mucho juego, sobre todo en manos de un Derrickson acostumbrado a moverse bien entre el miedo metafísico y el drama familiar, pero el resultado se queda a medio camino entre Pesadilla en Elm Street y cualquier producto de terror adolescente de manual.
Ethan Hawke repite con solvencia su papel más oscuro, aunque su presencia se reduce a una especie de fantasma vengativo sin el carisma ni la amenaza que tanto funcionaban en la original. Mason Thames y Madeleine McGraw mantienen el tipo, sobre todo ella, que aporta algo de emotividad a un guion que carece de verdadero suspense. Donde antes había silencio y angustia, ahora hay sobresaltos previsibles y un abuso del efectismo sonoro.
Visualmente, Black Phone 2 conserva la fotografía de Pär M. Ekberg, que vuelve a jugar con luces frías y escenarios desolados, pero ni siquiera ese envoltorio elegante puede disimular lo convencional de una trama que nunca asusta y apenas emociona.
Como curiosidad, durante el rodaje en Calgary, Ethan Hawke confesó en una entrevista que volvió a escuchar grabaciones del propio Derrickson susurrando al micrófono para meterse en la piel del “Grabber”, intentando recuperar la voz y el tono demoníaco de la primera entrega. Un detalle que demuestra las ganas de su intérprete, aunque el guion no le acompañe.
Presentada en el Festival de Sitges 2025 como uno de los títulos más esperados del certamen, Black Phone 2 pasó, sin embargo, sin pena ni gloria. Los fans más acérrimos del género quizá encuentren algún destello de nostalgia o una cierta coherencia en la continuación, pero para el resto el film resultará una secuela tan innecesaria como olvidable
Derrickson prometía hacer sonar de nuevo el teléfono… pero esta vez, al otro lado, no hay nadie.
NOTA: 5/10
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Nota: solo los miembros de este blog pueden publicar comentarios.