Director Joaquín Mazón
Guion Roberto Jiménez
Reparto: Pablo Chiapella, Raquel Guerrero, Nerea Pascual, Álvaro Lafuente, Noah Casas, Edurne, Iñaki Miramón, María Córdoba.
Producción Juan Moreno, Koldo Zuazua, Guillermo Sempere
Fotografía Chiqui Palma
Montaje Jani Madrileño
Música: Vicente Ortiz
Maquillaje: Miguel Sesé
Peluquería: Carmen Veinat
Sonido: Leticia Argudo
Vestuario: Maite Tarilonte
Distribuidora Disney
Año: 2025
Título Original: El Casoplon
Estreno En España: 16/04/25 en cines y 05/09/25 en plataformas Movistar Plus
Género: Comedia, Familiar.
Duración: 88 Minutos.
ARGUMENTO
Carlos y sus tres hijos están pasando el peor verano de sus vidas; sin vacaciones, encerrados en un piso de 50 metros cuadrados y con ambos padres trabajando a tiempo completo. Y para colmo se estropea el aire acondicionado en plena ola de calor. Toñi y los niños convencen a Carlos para quedarse a dormir en el casoplón vacío donde le ha tocado trabajar como jardinero durante un par de semanas. Lo que iba a ser una escapada puntual del bochorno veraniego se convierte en unas vacaciones inolvidables y llenas de aventuras, entre mansiones y vecinas famosas, que transformarán a los miembros de esta familia y les harán replantearse lo que de verdad es importante para cada uno de ellos.
CRÍTICA
El cine de Joaquín Mazón nunca ha pretendido reinventar la rueda, y con El casoplón vuelve a dejarlo claro desde el primer minuto. Una comedia familiar de trazo grueso pero amable, pensada para todos los públicos, que no incomoda en ningún momento y se deja ver con esa facilidad que caracteriza a los productos de consumo rápido. No aporta nada nuevo al género, pero tampoco lo pretende: su mayor virtud es no molestar.
El guion de Roberto Jiménez se mueve entre la crítica ligera y el entretenimiento sin complicaciones. Resulta curioso cómo, sin estridencias, introduce temas tan serios como el abuso de poder en el trabajo o las diferencias sociales, aunque siempre desde una mirada benevolente, casi didáctica, evitando que el tono desenfadado se rompa. Es en esa suavidad donde reside tanto su fuerza como su debilidad: suficiente para dejar constancia de los problemas, insuficiente para dejar huella en el espectador.
Las interpretaciones acompañan a ese tono. Pablo Chiapella y Raquel Guerrero cumplen con oficio en los roles protagonistas, con un elenco juvenil que aporta frescura y cierta naturalidad. Edurne, en su breve intervención, funciona como guiño cómplice para el público televisivo y añade un punto de simpatía extra. Nada sobresale, pero nada chirría: todo se ajusta a lo esperado en una comedia de estas características
Mazón maneja la cámara con la solvencia de quien ya sabe moverse en este tipo de terrenos. Hay oficio, ritmo ágil y algún que otro gag que arranca una sonrisa sincera. Sin embargo, la sensación general es de producto ligero, de esos que se disfrutan en el momento pero se olvidan al poco tiempo.
Como curiosidad, el rodaje se desarrolló entre Madrid y el País Vasco en pleno mes de agosto, y más de una escena tuvo que adaptarse debido a una ola de calor que obligó a modificar horarios y localizaciones. Un detalle menor, pero que da muestra de lo complicado que resulta a veces levantar una producción que, en pantalla, parece tan sencilla
En definitiva, El casoplón es justo lo que promete: una película familiar, entretenida, correcta en su forma y bienintencionada en su fondo. No dejará huella en la historia del cine español, pero durante sus escasos 88 minutos cumple su cometido: ofrecer un rato de evasión sin mayores pretensiones
NOTA 5/10
..
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Nota: solo los miembros de este blog pueden publicar comentarios.