MEZCLA SONORA LA PERRA BLANCO- NUMBER ONE FOOL

Con “Number One Fool”, La Perra Blanco no solo firma la carta de presentación de su próximo álbum Lovers & Fears —previsto para enero—, sino que entrega un puñetazo de auténtico rock & blues de los que ya casi no se escuchan en nuestro país. Es, directamente, un pelotazo, una de esas canciones que entran a la primera y que, cuanto más la escuchas, más te pide volver a ella

Con “Number One Fool”, La Perra Blanco no solo firma la carta de presentación de su próximo álbum Lovers & Fears —previsto para enero—, sino que entrega un puñetazo de auténtico rock & blues de los que ya casi no se escuchan en nuestro país. Es, directamente, un pelotazo, una de esas canciones que entran a la primera y que, cuanto más la escuchas, más te pide volver a ella

El tema gira en torno a esos amores equivocados en los que caemos aun sabiendo que vamos de cabeza contra un muro. Ese sentimiento de saberse “el tonto número uno”, pero aun así seguir adelante, está narrado con una mezcla de desgarro y electricidad que solo La Perra Blanco sabe imprimir. Su voz vuelve a sonar fibrosa, cálida, honesta, con esa pátina añeja que parece transportar el blues del Mississippi a un local nocturno de Cádiz sin que nada chirríe.

Musicalmente, la canción es compacta, directa, sin adornos innecesarios. Una guitarra que muerde, una base rítmica que camina con solvencia y un estribillo que se te pega como un tatuaje en la memoria. Es de esas composiciones que demuestran que lo clásico sigue funcionando cuando se ejecuta con alma. Y La Perra Blanco tiene alma para repartir.

La artista vuelve a demostrar que su propuesta no es una pose ni un revival prefabricado: es pura convicción. Y “Number One Fool” funciona precisamente porque detrás hay verdad. No solo suena a rock & blues; respira rock & blues. Si este single es un anticipo fiel de lo que traerá Lovers & Fears, más de uno debería ir reservando hueco entre sus discos del año

Durante las sesiones del estudio —según ha trascendido entre su equipo técnico—, la toma vocal definitiva surgió casi por accidente. La banda estaba calentando y La Perra Blanco empezó a cantar “para coger tono”. Cuando terminó, el productor asomó por la pecera y dijo: “Si lo haces otra vez así, la estropeas. Esa es la buena”. Y esa toma espontánea, cargada de intención y de sentimiento crudo, es la que finalmente se quedó en el máster

Una canción que confirma que La Perra Blanco sigue en estado de gracia. Y si esto es solo el comienzo, enero promete ser un mes eléctrico.

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