LA VIDA FUERA

Dirección: Mario Martone. 

Guion: Mario Martone; Ippolita Di Majo. Basada en: L’università di Rebibbi (1983) novela autobiografía de Goliarda Sapienza. 

RepartoValeria Golino; Matilda De Angelis; Elodie, Corrado Fortuna; Stefano Dionisi; Antonio Gerardi; Francesco Gheghi; Daphne Scoccia; Francesco Siciliano; Luisa De Santis; Carolina Rosi; Sonia Zhou Fenxia; Ondina Quadri; Paola Pace 

Música: Valerio Vigliar

Fotografía: Paolo Carnera.

 Montaje: Jacopo Quadri

Vestuario: Carmine Guarino

Distribuidora: Avalón

Año:2025

Título Original: Fuori

Estreno En España; 12/12/25

Género: Drama , Autor 

Duración: 115 Minutos 

ARGUMENTO 

Roma, verano de 1980. Tras un acto impulsivo, la escritora Goliarda Sapienza acaba en prisión. El encuentro con un grupo de jóvenes reclusas le cambiará la vida. Cuando recupera su libertad, Goliarda mantiene con ellas un vínculo profundo que nadie más puede comprender, un lazo que le llevará a redescubrir la alegría de vivir y el impulso de volver a escribir.

CRÍTICA. 

La vida fuera es uno de esos filmes que, sobre el papel, prometían mucho más de lo que finalmente ofrecen. Tiene una historia real potente —la experiencia de la escritora Goliarda Sapienza en la cárcel de Rebibbia y el vínculo inesperado que crea con un grupo de jóvenes reclusas— y una ambientación cuidada que nos traslada sin fisuras a aquella Roma de comienzos de los ochenta. Sin embargo, la película, lejos de avanzar con la fuerza que su premisa reclama, se queda a medio camino por culpa de un montaje irregular que entorpece el desarrollo emocional y vuelve el relato innecesariamente reiterativo.

Mario Martone sabe mover la cámara, sabe trabajar la textura de los espacios penitenciarios y sabe rodearse de intérpretes solventes. Eso se nota desde el primer minuto. Las actuaciones, de hecho, están bien —hay momentos de auténtica conexión entre las actrices que interpretan a las internas—, pero no son suficientes para compensar la falta de pulso narrativo. El espectador termina dando vueltas sobre los mismos conflictos sin que estos lleguen a evolucionar con la fuerza esperada. Y lo que debería ser un viaje interior poderoso, basado en hechos reales que tienen un enorme potencial dramático, se convierte en un trayecto demasiado previsible, sin aristas que sorprendan o descoloquen.

.La película funciona mejor cuando se detiene en lo cotidiano: pequeños gestos, silencios, la construcción de esa extraña comunidad femenina que sostiene a Goliarda cuando el exterior le ha dado la espalda. Es ahí donde asoma la película que La vida fuera podría haber sido. Pero cada vez que quiere alzar el vuelo, la estructura vuelve a derrumbarse bajo la repetición y la falta de dirección emocional clara.

Martone decidió filmar varias de las escenas en módulos reales de antiguas prisiones italianas que ya no estaban en funcionamiento, lo que obligó al equipo a trabajar con condiciones de luz muy limitadas. Según contaron las actrices en entrevistas, esa atmósfera cerrada y áspera hizo que los ensayos fueran más intensos de lo habitual, y algunas se quedaron dentro de los pasillos incluso después de cortar para “no perder el estado emocional”.

En definitiva, La vida fuera es un filme que tenía mimbres para ser mucho más redondo, más contundente, más memorable. Queda un buen trabajo interpretativo y una ambientación sólida, pero también la sensación de que la película nunca termina de encontrar su centro. Y eso, en una historia que depende tanto del crecimiento emocional de su protagonista, es un obstáculo difícil de salvar.

NOTA 4,5/10