KEEPER

Dirección: Osgood Perkins. 

Guion: Nick Lepard.

Reparto Tatiana Maslany,Rossif Sutherland,Kett (Birkett) Turton, Eden Weiss, Claire Friesen.

Erin BoyesGlen Gordon,Logan Pierce.,Gina Vultaggio,Tess DegensteinCassandra Ebner.

Christin Park

Música: Edo Van Breemen. 

Fotografía: Jeremy Cox. 

Montaje: Graham Fortin; Greg Ng.

Distribuidora: DeaPlaneta 

Año: 2025

Título Original: Keeper

Estreno En España: 19/12/25

Género: Terror,  Thriller.

Duración: 99 Minutos 

ARGUMENTO 

Una escapada romántica a una cabaña aislada se convierte en una auténtica pesadilla cuando una presencia oscura obliga a la pareja a enfrentarse a los horripilantes secretos de la casa. 

CRÍTICA 

Hay películas que no necesitan reinventar el género para dejar huella. Keeper se instala cómodamente en el territorio, ya muy transitado, de las casas encantadas y asume sin complejos que no viene a descubrir nada nuevo. Y, sin embargo, lo interesante del filme de Osgood Perkins no está en lo que cuenta, sino en cómo lo cuenta. Perkins vuelve a demostrar que su verdadero talento reside en convertir escenas aparentemente inofensivas —un pasillo, una puerta entreabierta, un silencio demasiado largo— en auténticos dispositivos de tensión

La historia es sencilla: una pareja se refugia en una casa aislada para pasar unos días de descanso, sin saber que ese lugar guarda un pasado inquietante que irá aflorando poco a poco. Lo que comienza como una escapada íntima y casi doméstica se transforma gradualmente en una experiencia opresiva, donde la casa deja de ser un espacio habitable para convertirse en un ente hostil. No hay grandes giros ni sorpresas narrativas; Perkins apuesta por la sugerencia y la atmósfera, fiel a una poética del terror que ya es marca de la casa

El principal valor de Keeper está en su puesta en escena. El director exprime al máximo los espacios cerrados, los encuadres asfixiantes y los tiempos muertos, construyendo una tensión que se sostiene más por lo que no se muestra que por lo explícito. Hay planos largos que rozan lo incómodo, silencios que pesan más que cualquier golpe de efecto y una sensación constante de amenaza latente. Perkins entiende que el miedo nace de la espera, no del sobresalto fácil.

Las interpretaciones acompañan con solvencia este planteamiento. El reparto entrega actuaciones contenidas, muy físicas, donde los gestos y las miradas sustituyen a los diálogos explicativos. Esa contención funciona a favor del clima inquietante, aunque en algunos tramos el desarrollo de los personajes se queda algo corto, impidiendo una mayor implicación emocional del espectador

Es cierto que estamos ante la obra más floja del director hasta la fecha, especialmente si la comparamos con trabajos anteriores donde el riesgo narrativo era mayor. Aquí Perkins juega sobre seguro, repitiendo esquemas ya conocidos y confiando casi exclusivamente en su pericia formal. Aun así, incluso en su versión más menor, el cineasta es capaz de regalar momentos de gran intensidad, escenas que se graban en la memoria por su precisión y su inquietante simplicidad.

Buena parte de la película se filmó en una única localización real, una casa antigua que el propio equipo describió como “incómoda” incluso fuera de cámara. Perkins optó por rodar muchas escenas con iluminación mínima y sin música añadida en el set, buscando que los actores reaccionaran de forma más instintiva al entorno y a los sonidos reales del lugar, una decisión que se percibe claramente en la naturalidad —y el desasosiego— de algunas secuencias.

En definitiva, Keeper no ampliará los límites del cine de terror ni redefinirá el subgénero de casas encantadas, pero sí confirma que Osgood Perkins es un autor con un pulso extraordinario para el suspense. Un filme irregular, contenido y a ratos demasiado previsible, pero que encuentra sus mejores momentos cuando confía en la sencillez y en la capacidad del cine para incomodar sin necesidad de alzar la voz. Una obra menor dentro de su filmografía, sí, pero firmada por un director que sabe exactamente dónde colocar la cámara… y cuándo dejarla quieta.

NOTA 6,5/10